Vélez Sarsfield le ganó por 1-0 como local a Estudiantes de La Plata y prolongó a cuatro su racha de triunfos consecutivos en el Torneo Apertura, en el cual no se resigna y quiere dar pelea por el título.
David Ramírez marcó, en el primer tiempo, el gol de la victoria del equipo de Ricardo Gareca, que va encontrando su nivel con el correr de los partidos y que sigue con participación en la Copa Sudamericana.
Vélez justificó la ventaja ya en el primer período. El gol lo consiguió David Ramírez, a los 6 minutos, con un zurdazo preciso que se metió al lado del poste izquierdo de Damián Albil.
El conjunto local presionó en a mitad de la cancha al rival y no lo dejó pensar, dejando a los dos delanteros platenses desconectados del resto del equipo y a merced de envíos largos y desprolijos.
Con su tenencia de pelota, Vélez hizo circular con corrección el balón, sobre todo por la izquierda de la defensa rival, donde Guillermo Domínguez y Facundo Coria tuvieron problemas para tomar a Augusto Fernández, en especial al comienzo del juego.
Hubo una buena tarea de Víctor Zapata en el mediocampo, Emiliano Papa hizo lo suyo a la hora de escalar por el carril izquierdo y los zagueros neutralizaron los pelotazos de Estudiantes. Así Vélez contruyó la victoria.
El resultado sólo corrió peligró a los 29 minutos, con una arremetida de Mariano González, tras un error compartido entre Papa y Zapata en la mitad de la cancha, que culminó con un derechazo cruzado del volante que el arquero Marcelo Barovero mandó al córner.
En el segundo capítulo Vélez le cedió el traje de protagonista a Estudiantes, pero el conjunto platense tuvo problemas en la generación de juego y casi no se acercó a Barovero frente a un equipo local que trató de salir prolijo para rematar el encuentro en una réplica.
En ese contexto, la primera jugada de peligro en el segundo tiempo se dio a los 26 minutos y fue para Vélez, por intermedio de un frentazo de Fernando Ortíz a la salida de un córner que Albil tapó abajo.
La única chance de la visita se dio por un disparo de Mauro Boselli, que tapó bien Barovero.
De esta forma, Vélez justificó la victoria, sobre todo por lo hecho en la primera parte, pero luego, con orden e inteligencia, manejó bien el trámite del partido.
Al final, Héctor Canteros hizo una gran apilada por izquierda, pero se quedó sin energías a la hora de definir, lo que hubiese sido el broche de oro del triunfo velezano.
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