Dejando todo en la cancha con el fin de lograr el triunfo que tanto necesitaba para soñar con la permanencia en Primera División, Quilmes doblegó el sábado a San Lorenzo de Almagro por 2-0, y ahora espera que All Boys y Vélez Sarsfield le den una mano para mantener la esperanza de llegar con chance a la última fecha.
Sobre todo por lo hecho en la primera etapa, Quilmes justificó el triunfo ante un equipo, San Lorenzo, que en el debut de Omar Asad como entrenador no mostró nada y se fue silbado de la cancha.
Fue Quilmes el que salió decidido a buscar la ventaja y gracias a un buen trabajo de sus mediocampistas rápidamente se adueñó de la pelota y manejó los tiempos del partido.
Un buen desempeño de Cerro, sobre el sector derecho, puso en constantes aprietos al paraguayo Aureliano Torres, quien por momentos no supo como contener los avances del Cervecero.
A los 5 minutos, tras un buen centro de Hernán Grana, desde la derecha, Diego Torres cabeceó sólo en el primer palo, pero Pablo Migliore reaccionó a tiempo y envió al córner.
A los 9, Martín Cauteruccio ingreso sobre la izquierda y definió cruzado, con Migliore vencido, pero Jonathan Bottinelli desvió al tiro de esquina.
De tanto buscarlo, finalmente llegó la ventaja. Corría el minuto 12, cuando Quilmes comenzó una contra. Cerro habilitó a Cauteruccio y el oriental le devolvió la pelota al volante santiagueño, quien definió a la derecha de Migliore.
Pese a la ventaja, Quilmes continuó buscando el arco rival y pudo aumentar a través de un buen remate de Cauteruccio, pero Migliore se arrojó bien sobre su izquierda y envió la pelota al córner.
Poco mostró San Lorenzo durante toda la primera parte. El equipo del Turco Asad no hizo pie en el mediocampo, lo cual repercutió en el ataque porque ni el uruguayo Juan Manuel Salgueiro ni Juan Carlos Menseguez tuvieron alguna chance de lastimar a Emanuel Trípodi. Con poco San Lorenzo se adueñó de la pelota en el segundo tiempo, aunque lateralizó demasiado, pero evidenció recurrentemente las carencias ofensivas que mostró a lo largo del certamen.
Quilmes, ya replegado en su campo, con la premisa de defender la ventaja, dispuso de un par de réplicas para aumentar el marcador.
Finalmente, en el minuto 42, Cauteruccio, tras una gran jugada que nació de una recuperación en campo de Quilmes, sacó un violento remate que ingresó alto, pegado al palo derecho de Migliore.
Así el partido dejó a los simpatizantes de Quilmes esperanzados y a los de San Lorenzo, una vez más decepcionados.
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