Lanús sigue respirándole en la nuca al líder del torneo Clausura porque venció este lunes por la noche con esfuerzo a Independiente 2-1, en el Estadio Libertadores de América.
A dos fechas del desenlace de la competencia doméstica, el equipo de Gabriel Schurrer llegó a sacar una diferencia de dos goles, por los aciertos de Diego Valeri y el uruguayo Mario Regueiro, pero el local tras el descuento que aportó Maximiliano Velázquez buscó el empate infructuosamente hasta el final y por lo tanto el triunfo corrió peligro.
Lanús pudo haberse impusto con mayor comodidad porque Hilario Navarro le atajó un penal a Silvio Romero, pero también el Rojo estuvo muy cerca de igualar sobre el epílogo, pero el árbitro Germán Delfino le anuló correctamente una conquista a Hernán Fredes por posición adelantada.
Por lo pronto, Lanús ya se aseguró la clasificación para la Copa Sudamericana 2011, en la que tenían garantizada una plaza Independiente, Vélez y Estudiantes de La Plata. Todavía hay espacio para otros tres representantes argentinos en ese certamen internacional.
Lanús capitalizó en su único remate al arco de todo el primer tiempo el gol que le permitió abrir el marcador. Fue a los 11 minutos, cuando el capitán Valeri con un tiro libre desde 25 metros colocó el balón junto al palo derecho de Hilario Navarro, luego de que infantilmente el colombiano Iván Vélez le cometiera una falta a Guido Pizarro.
El planteo de Lanús fue claro, ordenado, con una doble línea de cuatro y dos delanteros. Le cedió la iniciativa al local, que durante toda la etapa resultó incapaz de encontrar un camino adecuado para vulnerar a Agustín Marchesín.
Lanús también tuvo una firme labor de Paolo Goltz en la defensa, el aceitado trabajo de sus mediocampistas a la hora de marcar y a Romero como su delantero más inquietante.
Las dos chances más claras que tuvo Independiente se produjeron cuando intentó llegar tocando. La primera ocurrió a los 20, tras una pared entre Vélez y Lucas Villafáñez, que el colombiano se vio impedido de concretar porque lo atoró Marchesin. En la segunda, a poco del final, el arquero nuevamente se lució privando del festejo a Maxi Velázquez, luego de una combinación entre Cristian Pellerano y Leandro Gracián.
En el segundo período Antonio Mohamed buscó más fútbol con entrada de Patricio Rodríguez, pero Lanús logró complicarlo de nuevo con una réplica en la que Julián Velázquez le cometió infracción dentro del área a Romero. El delantero cordobés convirtió primero, pero Delfino hizo repetir la ejecución por la invasión de zona de César Carranza. En la repetición Romero tiró a la derecha de Navarro, pero el arquero adivinó la intención y sacó la pelota al córner.
De ese tiro de esquina llegó un cabezazo de Goltz que terminó dando en la base del poste derecho. Poco a poco el juego se tornó de ida y vuelta, Independiente acechó el área de Marchesín, pero el Granate desde los pies de Mario Camoranesi fue más incisivo.
A los 22 el marplatense habilitó a Romero, quien eludió a Navarro y remató, pero en la línea salvó Julián Velázquez. Siete minutos después quien fue campeón mundial con el seleccionado italiano llevó las riendas en un efectivo contraataque que concluyó en el segundo tanto visitante porque Regueiro resolvió de zurda.
El Rojo se fue en procura del descuento y lo consiguió mediante un cabezazo de Maxi Velázquez, a diez minutos del desenlace.
A partir de entonces el más claro en ataque fue Independiente y Hernán Fredes mandó la pelota a la red, pero la acción resultó invalidada por posición adelantada.
Lanús tuvo todo como para ganar con tranquilidad, pero la reacción de Independiente lo hizo sufrir antes de poder desatar el festejo que lo mantiene en la lucha por el título.
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