Llevarse "algo" de Santa Fe era el objetivo del Cerro Porteño paraguayo y logró embolsar todo por superioridad técnica y efectividad bajo los palos con una victoria 2-1 ante el Colón argentino, en el partido de ida de los octavos de final de la Copa Sudamericana.
Pedro Benítez (m.21) y Roberto Nanni (m.77) marcaron los goles del conjunto de Asunción y Lucas Mugni (m.45) el de los locales, obligados ahora a ganar fuera de casa, en un partido en el que el arquero paraguayo Diego Barreto fue una de las figuras.
El técnico Jorge Fossati estuvo lejos de apelar a la clásica bravuconada de los boxeadores que antes de un combate prometen demoler a sus rivales. Afirmó que su equipo haría todo lo posible para llevarse un rédito de Santa Fe que le sirviera para el choque de vuelta en Asunción, y dijo la verdad.
Desde el comienzo se vio a Cerro Porteño dispuesto a jugar en campo rival, como si se tratara del conjunto local, con lo cual desarticuló al Colón y le puso en aprietos de manera temprana.
Dos Santos, Fabbro, Walter López y Oviedo coparon el patio santafesino, presionaron a fondo y crearon las mejores situaciones de peligro para que los puntas Salcedo y Hernán Rodrigo López avisaran al arquero argentino Diego Pozo que no estaban de paseo en estas tierras.
Colón se quedó frenado, trabado, neutralizado en el juego. Casi no pisó el área paraguaya y a la salida de un córner el defensor Pedro Benítez abrió el marcador para los azulgrana con un remate de cabeza a los 21 minutos.
En una réplica de Colón, el propio Benítez cabeceó al revés, contra su meta, y obligó a su arquero Barreto a esforzarse para desviar el balón a los 37, y dos minutos más tarde el mismo arquero le detuvo un penal a Iván Moreno tras una falta de César Benítez contra Uribarri.
Un error y una falta discutida dieron a Colón la posibilidad de igualar, pero todo indicaba que no era la noche del conjunto que dirige Roberto Sensini y las pruebas estaban a la vista.
En la jugada ofensiva más clara que tuvo la formación argentina en la primera parte, otra vez Barreto neutralizó el balón que llevaba dominado en el área Iván Moreno a los 42 y volvía a salvar su arco.
Pero no pudo en el minuto final del capítulo inicial, cuando Uglessich rechazó la pelota de manera defectuosa y Lucas Mugni, la nueva joya surgida de la cantera rojinegra, igualó con un impecable remate de zurda al segundo palo del arquero asunceno.
Se mantuvo más activo, mejor estructurado y más profundo Cerro en el comienzo de la segunda parte. A los 51 minutos el árbitro expulsó al puntero local Ramírez y al centrocampista visitante Walter López por agresión mutua y a los 52 el estadio se quedó a oscuras por un corte de energía eléctrica.
Tras ocho minutos de interrupción se reanudó el partido, el equipo paraguayo mantuvo el dominio de la situación aunque no el dominio de la pelota mientras que Colón tenía reacciones esporádicas sobre todo por la derecha a través de Maxi Caire.
Un cambio dispuesto por Fossati le dio a Cerro Porteño la ventaja que buscaba a menos de un cuarto de hora para el final. Hizo salir al campo al delantero Roberto Nanni por Santiago Salcedo y en la primera jugada en la que participó aquel marcó el 1-2 con un preciso remate raso junto a un palo.
Barreto volvió a salvar a su portería en los minutos finales, cuando Colón intentaba un nuevo empate, que no merecía ni consiguió.
Este partido de ida de los octavos de final de la Copa Sudamericana se jugó en el estadio Estanislao López, del club Colón, ante 35.000 espectadores. El uruguayo Fossati, entrenador del equipo paraguayo, fue ovacionado por el público local que recuerda su paso por el club hace una década.
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