Quilmes derrotó esta noche como local a Almirante Brown por 2 a 0, por la segunda fecha del torneo de la Primera “B” Nacional. En la vuelta al Estadio Centenario, El Cervecero fue claramente superior a su rival, dominó, generó más situaciones y liquidó el partido en el primer tiempo.
La segunda etapa estuvo de más.
El encuentro comenzó de la mejor manera para El Cervecero. Salió a “comerse” a su rival, a meterlo contra su arco, y en la primera que tuvo, abrió la cuenta. Iban 5 minutos, Martín Cauteruccio apuró a un defensor y le ganó la pelota, se escapó, se metió al área, definió sin ángulo sobre la salida del arquero Gastón Losa que dio rebote y apareció Claudio Corvalán para empujarla y poner el 1 a 0. Quilmes ganaba casi desde los vestuarios, y lejos de conformarse con eso, siguió en busca del segundo. A los 11 y tras un pelotazo largo, Pablo Vázquez cabeceó de espaldas en el área y Losa sacó la pelota casi de un ángulo. Almirante sólo apostaba a algún que otro remate de afuera, como cuando José Luis García remató y la pelota se fue cerca. Pero Quilmes seguía dominando y llegando. La subida de Germán Mandarino por sorpresa complicaba al fondo visitante, y a los 19 tuvo una clara tras una jugada de Cauteruccio, pero el remate del volante fue tapado por Losa. Y a los 25, llegó el segundo. Tiro libre de casi treinta metros, le dio Sebastián Martínez a colocar y clavó la pelota contra el palo izquierdo del arquero, para poner el 2 a 0. Pero no todo podía ser positivo: a los 41 se lesionó Jacobo Mansilla y le dejó su lugar a Cristian Bustos. Los minutos pasaron, El Cervecero siguió controlando la pelota hasta que se fue la primera etapa con una victoria parcial muy merecida.
Controló el partido y no pasó sobresaltos
En el segundo tiempo Quilmes salió en principio a tratar de aumentar, golear y liquidar la historia. Almirante no le encontraba la vuelta al partido y seguía doblegado, metido en su campo. Quilmes llegó con un buen enganche y un remate de Bustos apenas arriba. A los 16 Emiliano Carrasco debutó en Primera reemplazando a Lucas Rimoldi, que se cansó de correr y recuperar pelotas. Con el correr del tiempo y con el cansancio acumulado, Quilmes iba cediendo terreno y dejándole la pelota a su rival, que sin ideas, no llegaba. Y El Cervecero, con los contraataques encabezados por Cauteruccio, siempre estuvo más cerca de aumentar. A los 19 casi lo tuvo, cuando Cauteruccio y Vázquez hicieron una pared, el propio Vázquez remató sobre la salida de Losa y el uno tapó bien. A los 29 entró Fernando Telechea por Vázquez buscando más velocidad en la contra. Almirante intentaba por el medio, por los costados, y siempre moría en la defensa cervecera. La única que tuvo llegó a través de García con un tiro libre, pero la pelota se fue apenas arriba. Los minutos pasaron, Almirante bajó los brazos, Quilmes controló el juego en los últimos instantes y terminó celebrando el triunfo.
Debut ideal en casa
Luego del mal paso en Corrientes, Quilmes mostró una cara totalmente distinta y esta noche ganó más que merecidamente. Siempre dominó, salvo en algunos pequeños pasajes de la segunda etapa, generó las situaciones más claras y no sufrió nunca en defensa. Lo mejor fue claramente Cauteruccio, pero también fue destacable lo de Rimoldi, Corvalán, Garnier y Sebastián Martínez. El reencuentro del Cervecero con su gente no pudo haber sido mejor y le dio una cálida alegría a todos los hinchas en una de las noches más frías del año.
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