Un árbitro fue salvajemente agredido por los jugadores e integrantes del cuerpo técnico de un equipo de la quinta división de Argentina, en un nuevo episodio de violencia en el fútbol de este país.
El réferi Alfredo Belén estaba arbitrando un encuentro de la Primera D entre Atlético Tostado y Unión San Guillermo, de la liga de Santa Fe, y tras expulsar a un jugador de Atlético Tostado fue atacado a trompadas por miembros de este equipo, según mostró la televisión.
El juez y los árbitros asistentes intentaron separar a los agresores, pero también fueron golpeados por estos, mientras que miembros del cuerpo técnico del Atlético y padres de los jugadores ingresaron a la cancha...pero para sumarse al ataque.
Las imágenes de TV mostraron los intentos del árbitro por alejarse de los agresores, quienes lo persiguieron por la cancha y fuera de ella, hasta que el hombre tuvo que saltar una de las rejas perimetrales del club para escapar.
Tras el escándalo se suspendió la actividad de la liga por 15 días, mientras se espera las sanciones para los culpables, informó la prensa.
Se presentaron denuncias penales y el árbitro dijo que por los golpes sufridos debió ser intervenido en el hospital de Ceres, una ciudad de 16.000 habitantes a 700 km al norte de Buenos Aires.
La violencia es un problema grave que afecta al fútbol argentino en todas sus categorías, en especial en las del ascenso, donde son frecuentes las peleas entre aficionados rivales en canchas rudimentarias que no reúnen condiciones de seguridad y carecen de
guardia policial.
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