Vélez Sarsfield 2-3 Quilmes

Quilmes brindó la sorpresa de la jornada al derrotar como visitante a Vélez Sarsfield, que llegaba como puntero y banca, por 3-2.

Héctor Canteros, a los 39 minutos de la parte inicial, le dio la ventaja parcial al conjunto que orienta tácticamente Ricardo Gareca.

Pero en la parte complementaria, Vélez sintió el trajín generado por jugar dos veces cada semana y Quilmes lo dio vuelta con un gol de Miguel Caneo y dos de Pablo Vázquez.

Sobre el final, y cuando Quilmes ya jugaba con diez por la expulsión de Pablo Garnier, Vélez descontó a través de Agustín Vuletich.

El primer tiempo fue cerrado con un trámite de juego previsible: Vélez manejó la pelota, con un marcado dominio territorial sobre Quilmes, que se replegó en su propio campo y ahí presionó con la intención de provocar un error y salir de contragolpe.

Y esa receta le dio buen resultado al equipo de Caruso en el inicio, ya que a los 4 un centro de Leyes al segundo palo fue cabeceado por Romeo exigiendo una buena respuesta de Barovero.

Y a los 17 fue Kalinski quien cabeceó un centro de Caneo desde la derecha y la pelota se fue apenas desviada. A pesar de la diferencia técnica que separa uno y otro equipo, ese primer tiempo fue parejo. El trajín acumulado por los conducido por Gareca se notó y les costó destrabar el cerrojo defensivo propuesto por Caruso y sus dirigidos. Pero Vélez fue paciente, no renunció nunca a una búsqueda prolija del arco rival y a los 18 tuvo su primera chance: Ricardo Alvarez, en una gran maniobra individual, dejó tres rivales por el piso y habilitó a Silva, quien solo frente al arco pifió su remate.

Y pese a no ser tan desequilibrante como en otras ocasiones, Vélez fue cercando a Quilmes y sobre el final de la etapa pudo romper el cerco. Un centro de Papa desde la izquierda derivó en un cabezazo bombeado de Canteros por el otro sector y la pelota se le metió por encima un Galíndez que se quedó sin chance de reaccionar. Vélez comenzó a perder piernas en la segunda mitad, a tal punto que llegó una sóla vez al arco rival durante la primera media hora de ese segmento con un disparo de Ricardo Alvarez que pegó en la base del poste izquierdo del arco de Galíndez.

A esa altura Quilmes ya había igualado el partido, después de que Caneo capitalizara un rebote en Barovero tras un corner sobre los 19 minutos.

Sin aire, el local intentó defender la punta pero sólo tuvo esa chance. Se mostró extrañamente impotente a la hora de atacar y quedó muy expuesto en defensa, permitiendo que el cervecero explotará los grandes huecos que dejó.

Y fue el ingresado Pablo Vázquez quien se vistió de héroe. A los 36 se equivocó Tobio y la pelota, tras algunos rebotes, le llegó al goleador que definió con un disparo cruzado.

Y al minuto, en un nuevo contragolpe, Vázquez fue habilitado por Cauteruccio para ampliar la diferencia. Enseguida Quilmes se quedó con diez por la expulsión de Garnier pero recién sufrió en tiempo de descuento cuando Vuletich definió de cabeza un centro de Augusto Fernández. No hubo tiempo para más. Quilmes gestó una victoria impensada y su esperanza sigue latiendo, mientras Vélez empieza a sentir el esfuerzo de jugar a dos puntas y esta derrota le dio un alerta sobre el panorama que enfrenta.