Martín Palermo estableció ayer su peor racha sin convertir goles, al superar con 813 minutos la marca de 770 que tenía vigente desde la época en que vistió la camiseta de Estudiantes de La Plata. Palermo llegó al partido ante Lanús con un acumulado de 748 minutos (el último tanto lo había marcado el 13 de diciembre de 2010 ante Gimnasia y Esgrima La Plata), a la cual hoy le sumó 60 minutos.
El récord se clavó en 813 minutos, porque Palermo, de bajo rendimiento al igual que el resto de sus compañeros, fue reemplazado a los 20 del complemento por Lucas Viatri.
Al momento de abandonar la cancha, Palermo recibió los aplausos de los hinchas de Boca, quienes también corearon su nombre.
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