domingo, 17 de abril de 2011

Gimnasia La Plata 0-0 River Plate

River Plate fue una sombra en La Plata y apenas empató 0-0 ante un Gimnasia y Esgrima que le hizo un planteo inteligente y hasta se lo pudo haber ganado sobre el final.

Fue una pálida imagen la exhibida por el puntero del campeonato en su excursión por tierras platenses, ya que no estuvo fino en la mitad de la cancha y le faltó claridad en ofensiva para desnivelar el tanteador.

El equipo de Angel Cappa, por su parte, estuvo bien parado desde lo táctico, ya que privó de espacios a su rival y dispuso de algunas chances como para quedarse con el encuentro, pero también falló en la puntada final.

De todas maneras, con este resultado River sigue siendo el líder del torneo con 19 unidades, al tiempo que el empate no le sirve de mucho a los platenses en su pelea por conservar la categoría, si bien le descontó una unidad a Huracán en la tabla de los promedios.

En los primeros minutos de partido Gimnasia intentó progresar por las bandas, abriendo la pelota constantemente para superar la línea de tres defensores que viene planteando River en los últimos partidos.

La visita, en tanto, verticalizó demasiado su juego, buscando penetrar la resistencia del Lobo por el centro del terreno.

La primera mitad quedó así planteada como un duelo táctico, en el que ambos elencos se midieron, pero en el que no crearon grandes situaciones de riesgo.

El primer intento de remate al arco llegó recién a los 19 minutos, aunque el disparo de Fabián Rinaudo se fue desviado.

Con el correr de los minutos el juego se volvió trabado, cada balón se disputó de manera vehemente. Más aún tras el encontronazo entre Mariano Pavone y Leandro Magallán, que le valió la amonestación a ambos.

La ocasión más clara para el conjunto millonario llegó a los 24 minutos de la mano de Diego Buonanotte, cuando remató desde fuera del área con pierna zurda, pasando su disparo cerca del palo izquierdo del arco defendido por Fernando Monetti.

Cinco minutos más tarde, Juan Pablo Carrizo salvó su valla tras un disparo a distancia de José Vizcarra que lo obligó a volar sobre su izquierda.

Hacia el final de la etapa no se crearon mayores situaciones de peligro. Sólo algunos destellos de Erik Lamela en River y la búsqueda casi incesante del local por explotar el sector izquierdo de su ataque con Luciano Aued y Juan Neira le dieron algo de suspenso al trámite.

En el segundo período Gimnasia intentó ser protagonista, se adueñó de la pelota y le faltó prolijidad. El ingreso del mellizo Guillermo Barros Schellotto le dio más presencia a su ataque y algunas pinceladas de buen juego.

River, en contrapartida, se fue apagando con el correr de los minutos, se convirtió en un equipo inofensivo al que le faltó la lucidez necesaria para atacar.

Milton Casco logró desnivelar por su sector en varias ocasiones, lo cual hizo peligrar la resistencia millonaria. Como ejemplo vale el remate que sacó el lateral a los 6 minutos y se fue por encima del arco o la jugada que creó a los 30 minutos para quedar mano a mano con Carrizo, aunque el arquero visitante ahogó el intento.

La escena más clara para River llegó recién a los 33, cuando el uruguayo Juan Manuel Díaz remató a puerta luego de una buena jugada entre Pavone y el ingresado Leandro Caruso, pero el envío se fue cerca del palo derecho de Monetti.

Sobre el final Gimnasia pudo haber ganado el partido. Tras un centro de Casco desde la derecha Pavone intentó rechazar, pero lo hizo defectuosamente hacia su valla, lo que ocasionó la espectacular reacción de Carrizo quien evitó el gol en propia valla.

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