sábado, 16 de abril de 2011

All Boys 3 - Huracan 1

El equipo de Floresta derrotó por 3-1 al Globo como local, cosechó su segunda victoria al hilo y tomó oxígeno. Fabbiani (PT 12 y 20m) se sacó la mufa y marcó un doblete, pero luego salió por lesión. Cámpora (PT 21m) hizo el descuento y Gigliotti (ST 6m) sentenció el duelo de penal. Los de Pompei continúan en zona de reválida.
All Boys derrotó por 3-1 a Huracán en Floresta, en uno de los duelos de la décima fecha del Torneo Clausura, y logró abandonar la zona de Promoción gracias a su segundo triunfo consecutivo. En la zona roja están Olimpo y el Globo, que sumó la segunda derrota en el ciclo de Pompei y está seis puntos por encima de Gimnasia, hoy en descenso directo.

Con la receta simple del toque corto, el Albo se adueñó de la iniciativa pese al ímpetu del Globo e hilvanó méritos para ponerse arriba. La ventaja llegó a los 12: Fabbiani recibió de espaldas al arco y a Quiroga, pero giró y sorprendió a todos con un remate de mediavuelta. Luego de casi 20 meses sin goles, el Ogro se sacó miles de kilos de mufa.

En el marco de un partido reñido, All Boys volvió a marcar diferencias gracias al ex delantero de River, que a los 20 tomó un rebote concedido por Monzón tras un potente disparo de Gigliotti. El segundo gol sí provocó una reacción en Huracán y Cámpora descontó al minuto con un cabezazo de pique al suelo, después de un centro del lateral Lemos por derecha.

Los dirigidos por Pompei fueron en búsqueda del empate ante un rival más tibio que en el comienzo. A los 31, Cambiasso disipó un potente tiro del zurdo Torres. Y a los 41, Cámpora le pifió a la pelota y derrochó el 2-2. El Albo atacó menos, pero igual se relamió a los 34 con el tercero de Fabbiani, pero el tercer tanto del Ogro fue mal anulado por offside.

"Siempre que llovió, paró", reza el refrán. Pero para Fabbiani, la frase sería: "Siempre que paró, volvió a llover". ¿Por qué? Debido a que el atacante debió salir en el entretiempo por un dolor en la pierna derecha. Igualmente, el ingreso de Torassa dio réditos, ya que el extremo fue sujetado de la camiseta por Angeloff y Abal cobró penal. El encargado de poner el 3-1 fue Gigliotti, a los seis minutos.

A Huracán no le quedaron fuerzas ni juego para soñar. Pompei no encontró variantes positivas y All Boys estuvo muy cerca del cuarto por intermedio del picante López, el volante izquierdo. Con la entrada de Morales por Lemos, el visitante armó una línea de tres atrás e intentó dañar, pero la defensa rival despejó los intentos frontales sin problemas.

El resultado final fue un fiel reflejo de la realidad de ambos: el Albo empezó a recuperar la memoria y se alivia, pero el Globo empieza a volar peligrosamente bajo tras la ilusión generada por el nuevo ciclo. En la lucha por quedarse en Primera, el primero recobró la energía del campeonato pasado y se esperanza, mientras el segundo es pura impotencia.

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