Una hincha de Central que fue detenida en Misiones al igual que otros 137, contó su versión acerca de la "humillación, robo y golpiza" que les propinó la policía misionera luego de un cruce con hinchas del Crucero del Norte, en cercanías del estadio. "Nos hacían bajar de a cinco y nos pegaban con palos, ramas, patadas y nos arrojaban gas pimienta". No obstante, aseguró que los hombres se llevaron la peor parte: "Los hacían trotar, y si no lo hacían les abrían la cabeza a machetazos y ni siquiera los atendían. Les robaron hasta los documentos", sintetizó.
Todo comenzó cuando, según el testimonio de la hincha que prefirió el anonimato por temor a represalias, la policía dirigió los micros de Central hacia el estadio pese a que el partido ya estaba suspendido. En ese momento, a la altura de una avenida, se toparon con micros de hinchas locales y se desató un tumulto. "Los hinchas de Crucero comenzaron a insultar y tirar piedras y algunos hinchas de Central bajaron de los micros", relató.
Cuando llegaron los refuerzos de la policía, redujeron a ambas parcialidades pero sólo detuvieron a los visitantes, según contó. "Comenzaron a subirnos a los colectivos pegándonos con palos, ramas, gas pimienta, y a uno de los chicos le rompieron la cabeza. Supuestamente nos llevaban a la comisaría por averiguación de antecedentes, pero cuando llegamos nos dijeron que bajemos de a cinco personas. A las primeras cinco le dieron con palos y gas pimienta y quedaron tiradas en el piso por eso después nadie quería bajar", aseguró la hincha.
En ese sentido, la simpatizante canalla precisó: "Primero bajaban los hombres mientras las mujeres nos quedamos arriba del colectivo, pero como le dijimos que nos habíamos comunicado con la comisión directiva la golpiza fue más leve. Nos hicieron dejar todo, desde plata, aros, cordones de zapatillas, todo. A la mayoría de las mujeres no les faltó nada, pero el maltrato verbal fue una constante, alguna que otra patada en las piernas pero no fue tan grave como a los hombres"
"De otro lado se escuchaba que a los chicos les decían que troten y se escuchaban los golpes. La versión que tienen ellos es que cuando ingresan los policías habían hecho como un puente y mientras bajaban les pegaban, no sólo con los machetes sino también con los borcegos, en las canillas y en las costillas. Se burlaron y los humillaron de una manera terrible, les hacían hacer cualquier cosa, colocarse gas pimienta en la mano y taparse la cara, a muchos les robaron el DNI", prosiguió.
Asimismo, sostuvo que "a la mayoría de las pertenencias se las robaron, los lastimaron, no los atendieron cuando los lastimaban en la cabeza con los machetes y los amenazaban cuando iban a ver al médico forense".
En tanto, el departamento Legales de Rosario Central recibirá mañana a los hinchas que se sintieron agredidos en Misiones para tomar cartas en el asunto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario