Dieguito es bastante más alto que ambos, mide 1,82 metros frente a los 1,67 de Lalo y Diego Armando, aunque Lalo ha insistido que "Diego hay uno sólo y nadie ha podido igualarle".
Para su padre, el nuevo fichaje de la UD Alzira, "tiene grandes posibilidades de ser un gran jugador pero se lo tiene que ganar él, se tiene que sentir cómodo".
Lalo añadió a Efe "es muy buen chico y responsable". "No puedo pedir más de un hijo, pero su madre lleva bastante mal su ausencia".
Mientras presenciaba el primer entrenamiento de su vástago advirtió "estar nervioso y tranquilo a la vez", además de asegurar que "Dieguito debe hacer lo que quiera, no está obligado a jugar al fútbol por llevar el apellido Maradona, debe jugar por puro sentimiento".
Nada más llegar a Valencia ya tiene previsto que su hijo inicie de inmediato los trámites para obtener la nacionalidad española, ya que sólo posee la canadiense.
Lalo trabaja desde hace unos meses en la cantera de Independiente de Buenos Aires, mientras que su segundo hijo, Jorge, de 19 años juega en los equipos inferiores de los Argentinos Juniors, escuela en la que también se formó el mayor, que inicia ahora su vida futbolística en España.
Por la liga española pasaron previamente su tío Diego Armando Maradona, en las filas del Barcelona y Sevilla, y su padre, que jugó tres temporadas en el Granada, ciudad en la que durante su estancia nació Diego Hernán, el 5 de enero del año 1989.
"De Granada y del Granada tengo los mejores recuerdos y muchos amigos con los que mantengo contacto telefónico", según Lalo, quien asegura "fueron los años más lindos de mi vida y encima nació Diego".
Dieguito tuvo esta tarde su primer contacto con sus nuevos compañeros que le han arropado en todo instante, especialmente el capitán y jugador referencia de la UD Alzira, Edu López por su veteranía y calidad.
Apenas iniciado el primer rondo, López le dijo ante todos sus compañeros, "chaval has entrado con buen pie", una manifestación originada porque Diego Hernán había elogiado el juego del capitán en las primeras declaraciones realizadas tras su llegada a Alzira.
El primer entrenamiento del joven Maradona transcurrió en medio de un buen ambiente y ante la atenta mirada del técnico, Frank Castelló, que deberá dar el visto bueno al fichaje del sobrino del Pelusa por la UD Alzira, club fundado en el año 1922 que llegó a militar en la categoría de plata del fútbol español.
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