Después de cinco partidos sin victorias, San Lorenzo volvió a la senda del éxito al derrotar como local a Tigre por 1-0, en un partido clave para ambos equipos que están luchando por mantener la categoría.
Nicolás Bianchi Arce, al minuto de juego y tras una clara falta de un compañero a Carlos Casteglione que el árbitro Carlos Maglio no percibió, le dio el triunfo a su equipo -el primero del torneo en la era Madelón- que, no obstante, sigue en zona de promoción en la tabla de promedios, pero al menos superó a All Boys en ese escalafón.
Tigre, que nunca le encontró la vuelta al partido y casi no inquietó al arquero Nereo Champagne, quedó en zona de descenso directo y deberá realizar un Clausura parecido a este Apertura que está tocando su fin, para conservar su lugar en la máxima categoría del fútbol argentino.
San Lorenzo tuvo la fortuna de abrir el marcador al inicio del partido, porque Carlos Maglio ignoró una clara infracción de Meza a Casteglione en la acción previa al gol que marcó Bianchi Arce.
Un centro de Salgueiro desde la izquierda fue desviado por Castiglione, quien, empujado por Meza, hizo pegar la pelota en el palo izquierdo del arco de Javier García. Y el rebote le quedó servido a Bianchi Arce quien sólo tuvo que empujarla al gol.
Tras la apertura del marcador, el Ciclón se replegó y complicó a Tigre, presionándolo ni bien cruzaba la mitad de la cancha. Por eso, Morales quedó muy aislado y el Matador tuvo que atacar de manera muy frontal, quedando muy desconectados Luna y Maggiolo.
Si bien al equipo de Victoria le costó llegar -sólo lo hizo a través de un tiro libre de Morales que se fue cerca del ángulo derecho-, el local tampoco generó acciones de riesgo.
Construyó algunos contragolpes, pero falló en la puntada final y se fue al descanso con la mínima diferencia.
En el segundo tiempo Tigre insistió con sus ataques frontales y casi no complicó al equipo azulgrana. Su mejor aproximación fue a los 14 minutos cuando Paparatto cabeceó un centro de Morales pero Champagne respondió bien.
San Lorenzo fue más peligroso y siempre estuvo más cerca de aumentar que Tigre de equilibrar el marcador. La más clara tuvo lugar a los 32, cuando Ortigoza y Romagnoli gestaron un contragolpe que Méndez definió con un remate cruzado que se fue muy cerca del poste izquierdo del arco de García.
A medida que fueron pasando los minutos San Lorenzo fue retrocediendo, pero Tigre no le encontró nunca la vuelta al partido y el Ciclón volvió a celebrar tras bastante tiempo, justo en un partido clave para su futuro.
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