Argentina está en deuda con su historia tanto a nivel continental como mundial. A pesar de haber sido finalista de la Copa América en 2004 y 2007, y de alcanzar la definición del Mundial del año pasado, el último título que obtuvo fue en 1993. Ese año ganó la Copa América en Ecuador, donde repitió el logro alcanzado dos años antes, justamente en Chile. Desde ese momento, Argentina no pudo alcanzar las instancias decisivas de la Copa hasta el 2004 en Perú.
A más de dos décadas de aquel logro, la “albiceleste” debe dar un paso al frente y en pocos días tratará de lograrlo con un plantel afianzado en el que Lionel Messi intentará sacarse la frustración de una vez por todas y ganar un título con su selección para sumar al impresionante palmarés que acumula con el Barcelona.
Messi volverá a estar acompañado por el artillero de la Juventus, Carlos Tevez, quien con el entrenador Gerardo Martino volvió a ponerse la casaca argentina tras varios años alejado del equipo.
Martino tiene muchas opciones en la línea ofensiva y debe definir el esquema con el que atacará, empezando por si usará un “9” clásico o no.
El entrenador sufre grandes contratiempos, porque no pudo contar desde el inicio de su preparación con figuras como Messi, Tevez o Javier Mascherano, quienes recién se sumaron al plantel después de jugar la final de la Liga de Campeones.
El DT decidió mantener la base del equipo mundialista, por lo que los hinchas esperan que esta vez sí puedan festejar un título.
De la nómina preliminar para la Copa quedaron fuera: Agustín Marchesín (Santos Laguna, México), Federico Fernández (Swansea, Inglaterra), Lucas Orban (Valencia, España), Enzo Pérez (Valencia, España), Federico Mancuello (Independiente, Argentina), Maxi Rodríguez (Newell’s, Argentina) y Nicolás Gaitán (Benfica, Portugal).
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