domingo, 15 de mayo de 2011

Video Lanús 3 - 2 Vélez Sarsfield

A pesar de la derrota por 3-2 ante Lanús, Vélez continúa como líder del campeonato, ante solamente a un punto de Godoy Cruz, poniéndole pimienta al Clausura 2011.
Lanús empezó con el dominio de la pelota pero el que primero pegó fue Vélez. A los cuatro minutos, Gastón Díaz prueba al arco, Agustín Marchesín da rebote y David Ramírez, de primera, manda la pelota a la red para el festejo de la parcialidad fortinera que se había acercado hasta el Sur del Conurbano.
Tres minutos más tarde, Bella casi llega al segundo, tras un regalo de Santiago Hoyos que aprovecha Ricky Alvarez para desbordar y mandar el centro para el lateral, cuyo remate se va al córner, tras rozar en un defensor.
Pero lejos estaba el partido de ser un monólogo de Vélez. A los diez, por ejemplo, avisaba Lanús, cuando Mauro Camoranesi se la robó a Zapata, tocó para Carranza, quien la abrió para Romero, cuyo centro queda en las manos de Barovero. No quedaría en las manos del arquero del Fortín el cabezazo de Hoyos, que se le mete entre las piernas al 1 velezano para determinar el 1-1 transitorio.
Dos minutos más tarde avisó Pizarro para Lanús, que Barovero contuvo sin mayores problemas. A los 20, en cambio, el que estuvo cerca del segundo fue Vélez, por intermedio de Bella, otra vez, que recibió de Zapata y probó desde afuera del área, encontrando la respuesta de Marchesín, quien volvía al arco tras el desgarro de Caranta en el aductor derecho la fecha pasada.
Hasta que a los 28, Ramírez, el goleador de Vélez en el torneo Clausura, hizo un jugadón y, una vez en el área, se llevó la pelota hacia adentro para buscar una mejor posición y sacar un derechazo que se le mete en el primer palo al joven arquero de Lanús. El Mago tendría una nueva chance de aumentar la ventaja cuando a los 35 minutos su tiro al arco pegó en el travesaño.
La respuesta de Lanús no tardaría en llegar. Y sería letal. Un error defensivo de Vélez le permitió a Diego Valeri, el goleador de su equipo también con seis tantos, desviar como si fuera uno de esos tanques del área un centro de Carranza desde la izquierda. Así, el local se ponía 2-2 en un partido espectacular, con mucho juego en las dos áreas. En el arraque del segundo tiempo, Silvio Romero se encargó de anotar el 3-2 en favor de Lanús, y ponerle cifras definitiivas al vibrante encuentro.

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