Arsenal volvió a sacar rédito este viernes de su contundencia y habilidad en las pelotas paradas para ganarle 3-1 a Argentinos Juniors en Sarandí y alcanzar a Boca Juniors en la punta del Torneo Clausura.
Lisandro López, de cabeza, Juan Sabia, en contra, y Luciano Leguizamón, de penal, marcaron los tantos del equipo de Gustavo Alfaro, que en la próxima fecha visitará a Boca, lo que será un partido decisivo para sus aspiraciones a luchar por el campeonato.
El liderazgo en la tabla Arsenal lo puede perder este sábado, ya que Boca jugará con Banfield, en el Estadio Florencio Sola.
A Argentinos le costó acomodarse en el encuentro, descontó por intermedio de Juan José Morales, y en su mejor momento sufrió la expulsión de Matías Laba.
Hubo un arranque a puro vértigo de Arsenal, especialmente con el colombiano Carlos Carbonero y Nicolás Aguirre por las bandas, y generó una situación de gol tras otra.
Tal es así, que en el primer minuto, Aguirre mandó un centro desde la izquierda, Carbonero cabeceó y la pelota sacudió los palos izquierdos y derecho, sucesivamente, aunque sin destino de gol.
Sin embargo, el tanto estaba al caer y llegó a los dos minutos. Leguizamón envió un tiro de esquina desde la izquierda a la cabeza de Lisandro López, quien desde el corazón del área impactó la pelota, que pegó en el poste derecho de Nereo Fernández e ingresó, pese a la esirada del guardavalla.
Tras la ventaja, Alfaro dio la orden de replegarse en el campo propio, con la intención de ampliar la diferencia de contragolpe y por eso fue Argentinos el que manejó la pelota en la mayor parte de la primera etapa.
Pese a esto, el cuadro de La Paternal se diluyó en un juego demasiado horizontal y por lo tanto se volvió intrascendente. Le costó tener profundidad al visitante y cuando la tuvo falló en los últimos metros.
En Arsenal se destacó el orden de sus líneas y, además de su contundencia, tuvo como virtud aprovechar las acciones originadas con pelota parada. Por esta vía, a los 20, el anfitrión marcó el segundo. Leguizamón ejecutó un tiro libre en el borde del área, la pelota rebotó en la barrera y el esférico salió despedido hacia dentro del área, por el sector derecho. Allí estaba Jorge Ortíz, quien mandó un buscapié y Sabia, con su arquero en el piso, definió de forma involuntaria contra su propia valla.
En el segundo período, Argentinos mejoró con el ingreso de Fabián Bordagaray, quien supo llevar peligro por la derecha y abasteció bien a sus compañeros. Por esta vía, el visitante achicó la distancia a los 15: pase entrelíneas para Morales, jugador que de mediavuelta remató al lado del palo izquierdo de Cristian Campestrini.
Arsenal especuló en demasía y por eso el partido se había tornado parejo. Pero, a los 18, Matías Laba fue expulsado por doble amonestación, tras una innecesaria falta a Carbonero en la mitad de la cancha.
Obligado por el resultado, Argentinos fue a buscar el empate, pero quedó expuesto en defensa ante los contraataques del adversario. En su de ellos, Carbonero, a los 29, escapó por derecha y Nicolás Berardo lo derribó dentro del área. Leguizamón, a los 30, cambió por gol la falta y selló la victoria.
El equipo de Alfaro ganó bien, gracias a una actuación muy convincente, y se anima a soñar.
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