Lionel Messi clavó un gran disparo desde fuera del área y salvó una pobre actuación argentina sobre Irán. La estrella albiceleste marcó el único gol del triunfo, a los 91 minutos del partido e hizo estallar a miles de argentinos en las graderías del estadio Mineirao de Belo Horizonte.
En esta primera fase de la Copa a Argentina le está costando superar a sus rivales en un grupo que parecía el más accesible. Si bien es cierto ganó sus dos compromisos (el primero fue ante Bosnia 2-1) pero aún no convence.
Juega con Lionel Messi, Ángel Di Maria y Sergio Agüero, tres delanteros que brillan en las grandes ligas de España e Inglaterra pero ante los rivales de turno, débiles en los papeles, no alumbran lo suficiente para mostrar algo mejor en este Mundial.
Por su parte, los dirigidos por el técnico Carlos Queiroz, cumplieron a cabalidad marcando bien las salidas de la escuadra de Alejandro Sabella. El mediocampo iraní compuesto por Masoud Shojaei, Andranik Timotian, Javad Nekounam y Ehsan Haji Safi fue la primera línea defensiva que no dejó moverse con tranquilidad a un rival, con circulación de balón pero pocas ideas para vulnerar la muralla iraní.
La mejor ocasión de gol para el cuadro iraní fue a los 53 minutos. Una gran jugada de Masoud Shojaei derivó en una habilitación para Sadeghi que envió un centro que fue conectado por Reza Ghoochannejad y que exigió una gran respuesta del portero Sergio Romero.
Los minutos fueron pasando y cuando se avizoraba un inminente empate apareció la genialidad de Messi. Recibió una pelota en el borde del área y con un remate cruzado convirtió el único tanto del partido. Su disparo cambio la historia y clasificó a Argentina a octavo de final.
Entretanto, Irán se queda con un punto y un pie fuera de Brasil 2014. Su última presentación será ante Bosnia el 25 de junio en el estadio Arena Fonte Nova, de Salvador.
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