Ya con todo el plantel argentino a disposición (Messi y Mascherano llegaron cerca de las 5 de la mañana de ayer, ya están los 26 convocados), Jorge Sampaoli, técnico de la Argentina, reunió a los jugadores, dio una charla puertas adentro de poco más de veinte minutos y luego probó un primer equipo pensando en el choque decisivo de mañana ante Perú.
El onceno fue el siguiente con: Sergio Romero al arco, defensa de tres con Nicolás Otamendi (el indicado según el técnico para controlar al delantero peruano Paolo Guerrero), Federico Fazio y Gabriel Mercado; Enzo Pérez, Lucas Biglia y Ever Banega en la primera línea del mediocampo; Lionel Messi suelto, y más adelante Emiliano Rigoni (también estuvo Eduardo Salvio en ese lugar), Mauro Icardi y Angel Di María. Es un 3-3-1-3 (al estilo Bielsa), pero flexible de acuerdo a dónde se ubican Rigoni y Di María (pasando a ser un 3-3-3-1 si se acercan a la línea de Leo).
Sampaoli tendrá hoy su último entrenamiento y definirá el onceno para el duelo crucial ante los peruanos.
A falta de dos jornadas, Argentina es quinta en estas eliminatorias con 24 puntos, detrás de Brasil (ya clasificado con 37 unidades), Uruguay (27), Colombia (26) y Perú (24). Le siguen Chile (23), Paraguay (21), Ecuador (20), Bolivia (13) y Venezuela (8).
La albiceleste, que ocupa el puesto que permite jugar una repesca ante Nueva Zelanda, visitará a Ecuador el martes 10 en la última jornada.
Uno de los dos jugadores que hablaron con la prensa al llegar a las instalaciones fue Salvio, quien dijo estar “contento” y “feliz de la vida” por haber sido convocado al seleccionado y poder jugar con Messi, a quien calificó como “el mejor del mundo”. “Estamos muy confiados para lo que viene. Así que tranquilos”, dijo el centrocampista del Benfica.
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