domingo, 24 de junio de 2018

Argentina volverá al clásico sistema para enfrentar a Nigeria

Lindo clima en Moscú, sol y viento fresco. El Bronnitsy Training Centre es el escenario de una práctica clave para Argentina, 15 minutos para los medios y llega el turno de Jorge Sampaoli, de que ponga sobre la mesa su carta más decisiva para sacar a la Albiceleste del pozo en el que está. En medio de un huracán de audios, encaradas y bronca, sale a flote una información de la cancha: El equipo volverá al 4-4-2 o al 4-3-3.

Ese fue al menos el acuerdo al que llegaron el DT con Messi y Mascherano en la última reunión que tuvieron para intentar salir a flote. Nigeria es el rival del martes y solo sirve una victoria para ahuyentar el fracaso de quedarse en la primera fase. Los jugadores y el cuerpo técnico saben de la extrema presión y fue por eso que pidieron un sistema más clásico, que les permita un mejor desenvolvimiento.
La presión sobre Sampaoli hoy es tremenda. Foto: Reuters

Atrás queda la apuesta de Sampaoli que terminó siendo un fracaso ante Croacia, de colocar tres en el fondo con Mercado, Otamendi y Tagliafico. No funcionó y la derrota por 0-3 los dejó al borde del abismo. La práctica de este domingo comenzó con una felicitación del técnico hacia Messi –fuerte abrazo y un beso- y un aplauso del plantel que permitió un trabajo más distendido de lo que se esperaba. No faltó nadie.

Los lesionados Otamendi, Mercado y Biglia que el día anterior habían hecho solo sesión de gimnasio, ahora estuvieron en cancha, listos y disponibles para un entrenador que espera una victoria para tener un alivio ante la catarata de críticas. No hay más espacio, no hay más resquicio para una Argentina que se juega su última carta justamente ante un rival que le dio vida tras ganarle a Islandia por 2-0.
Mascherano (dcha.) habló tras la práctica. Foto: Reuters

Es posible que Pavón juegue de entrada en ofensiva junto a Agüero y que Banega sea el ‘Iniesta’ del Barcelona para que juegue con Messi. El equipo busca sacudirse de tanto ‘cabaret’ (como lo califican los argentinos) de los últimos días en el que incluso se llegó a decir que Jorge Burruchaga iba a ser el técnico ante el pedido del plantel de que ‘Sampa’ no dirija más por las diferencias que explotaron tras Croacia.

Encima salió un audio de un histórico como Giusti ratificando esa posición y del DT Carusso Lombardi hablando de una pelea a puños entre Mascherado y Pavón –porque este último salió a defender a Caballero tras su error-. Una foto de ambos acabó por acabar con el lío de la que los mismos periodistas dicen sentir vergüenza. Argumentan que lo que pasa en Argentina, superó de lejos el escándalo de Lopetegui en España.
Messi en la práctica. Hay expectativa por lo que haga el martes. Foto: Reuters

Luego de la práctica hubo una conferencia de prensa en la que comparecieron los jugadores Javier Mascherano y Lucas Biglia y el presidente de AFA, ‘Chiqui’ Tapia. “Me pareció oportuno venir para decirles que muchas de las cosas que ustedes dicen son mentiras, muchas por dar las primicias, pero ahora necesitamos apoyo y es lo que le pedimos también a los hinchas”, dijo Tapia poco antes de abandonar la sala.

Mascherano en tanto admitió que todo el ruido que hubo en las últimas horas siempre termina por perjudicar a la selección y que lo han sentido, pero que pese a ello ahora se han centrado en Nigeria porque saben lo que se juegan. “Cada uno desde su lugar busca aportar algo para sumar al grupo”, añadió Masche. Sobre si el técnico habla con ellos por la alineación, dijo que sí, pero que es algo normal “porque el jugador es lo que toma las decisiones dentro de la cancha; pero no es por consensuar la alineación sino para ver tus sentimientos, cómo estás”, cerró el ‘Jefecito’.

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