Video Argentinos Juniors 1 - 3 Quilmes

Con actitud, aptitud, dos golazos desde 40 metros y otro de tiro libre, Quilmes le ganó en la noche de este lunes a Argentinos Juniors 3-1 en La Paternal y salió así, de momento, de la zona de descenso, en la que dejó a Independiente.

Sebastián Romero, a los 32 minutos del primer tiempo de emboquillada, y Wilfredo Olivera, a los 9 del segundo período mediante un remate potentísimo, le daban la victoria inapelable al Cervecero. La obra la terminó de asegurar, a los 31, Jacobo Mansilla, de tiro libre, al acomodar el balón por arriba de la barrera y junto al ángulo superior izquierdo de la valla de Luis Ojeda.

El sureño se apoderó de este modo de tres puntos vitales en los días previos al crucial cotejo ante Independiente.

En el Estadio Diego Armando Maradona, y por la quinta fecha del Torneo Final, Argentinos se había aferrado a una esperanza que pareció emerger de la nada cuando a los 19 minutos de la segunda parte Matías Martínez, de cabeza, había descontado al recoger el fruto de un tiro de esquina.

Como para que Quilmes se complicara todavía más de la noche a la mañana, a los 26 minutos del segundo capítulo perdió una pieza clave para lo que quedaba del juego ante los Bichitos Colorados y para el tan sensible compromiso frente a los Rojos: el equilibrista Juan Manuel Cobo fue muy fuerte contra Leandro Barrera en la mitad de la cancha y se ganó la tarjeta roja directa que le sacó Pablo Lunati.

Pero el suspenso tuvo una corta duración, ya que al poner Mansilla el 3-1 el encuentro retomó su cauce original. Con este resultado Independiente pasó a ser uno de los tres equipos de que momento estarían perdiendo la categoría, ya que los otros dos son San Martín de San Juan y Unión de Santa Fe.

Quilmes se llevó desde el escenario porteño una victoria estupenda, porque fue muy superior a su debilitado oponente de turno, el que no deja de caer en el rendimiento y en la tabla de los promedios, por lo que la alarma ya suena fuerte en el barrio de La Paternal.

El conjunto blanco se sintió como en su casa, fue el dominador de las acciones y el dueño exclusivo de la pelota, la que además supo administrar.

Además los dos bombazos desde 40 metros dieron la impresión de agravar el caos en el elenco que en forma interina conduce Fabián De Sarrasqueta.

El juego fue prácticamente durante toda la noche el mismo, con Quilmes patrón ante un Argentinos impotente e insolvente.

En definitiva, Argentinos es un paciente que preocupa a los médicos y a quienes lo quieren.

En cambio, Quilmes se sobrepone en un momento clave de la temporada. El de Omar De Felippe es un conjunto que quiere dejar la terapia intensiva en la tabla de los porcentuales.