El centrocampista Daniel ´Rolfi´ Montenegro, de 36 años, comandará al Huracán argentino en la Copa Libertadores que comienza este martes e intentará que el club que lo vio nacer como futbolista gane el primer título internacional de su historia.
El creativo debutó en 1997 en Huracán, donde jugó hasta mediados de 1999, cuando fue traspasado al Marsella francés.
No pudo ganarse un lugar en el equipo titular y fue cedido a préstamo por seis meses al Independiente argentino, donde tuvo una gran actuación al anotar siete goles en 19 partidos.
Vistió las camisetas de los españoles Real Zaragoza y Osasuna para luego tener en 2002 un fugaz regreso a Huracán.
Formó una dupla letal con el centrocampista Luis ´Lucho´ González, que hizo que el ´Globo´ peleara el Torneo Clausura de la Liga argentina hasta las últimas fechas.
Luego, fichó por Independiente, donde fue una pieza clave del equipo que se consagró campeón del Torneo Apertura de 2002.
En 2003 jugó en el River Plate argentino y ganó el Torneo Clausura del año siguiente.
Fue traspasado al Saturn Moskovskaya ruso pero, al no afianzarse en el primer equipo, regresó en 2005 a River Plate.
Se convirtió en una de las figuras del conjunto ´Millonario´ e incluso se consagró goleador, junto con otros doce jugadores, de la Copa Libertadores de 2006.
A mediados de ese año inició su tercera etapa en Independiente en la que alternó buenas y malas actuaciones.
En 2009 fichó por el América mexicano, donde brilló pero no logró ganar ningún título.
En 2013 comenzó lo que sería su cuarta etapa en Independiente y ese mismo año el club descendió a la segunda categoría del fútbol argentino por primera vez en su historia.
Al año siguiente, el ´Rolfi´ fue una pieza clave del plantel que consiguió el ascenso a la primera división de la Liga argentina.
A comienzos de 2015 Montenegró regresó a Huracán, el club que lo formó profesionalmente.
"Le agradezco a Dios la posibilidad de volver al club del que soy hincha. Tengo la posibilidad de volver a mi casa para brindarle todo lo que adquirí durante todos estos años", dijo Montenegro.
A los pocos meses de su arribo, el ´Globo´ ganó la Supercopa Argentina, aunque el creativo vio todo el partido desde el banco de suplentes.
Con el correr de los meses recuperó su nivel y se convirtió en un jugador indispensable para el equipo.
Huracán, que aseguró su permanencia en la primera división de la Liga argentina en la última fecha del certamen, fue subcampeón de la Copa Sudamericana 2015 y quedó a un paso de conseguir el primer título internacional de su historia.
Montenegro suele jugar de enganche aunque también actuó como volante por las bandas o como segundo delantero.
Su principal virtud es su fuerte remate y la precisión en los pases. Con el paso de los años su velocidad y reflejos mermaron, pero mantiene intacta la facilidad para pasar el balón y la inteligencia para identificar quien es el compañero mejor ubicado para recibirlo.
En esta última etapa en Huracán comparte las responsabilidades creativas con Patricio Toranzo, un centrocampista de similares características, y con Cristian Espinoza, que suele jugar abierto por la derecha y se caracteriza por sus desbordes en velocidad.
Apenas comenzado este año, Montenegro renovó su contrato con Huracán por los próximos 18 meses para intentar convertir en realidad el sueño de ganar la Copa Libertadores.
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