Gimnasia y Esgrima de Jujuy rompió la mala racha de trece partidos sin sumar puntos, y este viernes en un encuentro muy disputado, empató en dos tantos con Huracán de Parque de los Patricios. Y no solo eso: pudo remontar un dos a cero en el primer tiempo y llegar al final con una igualdad que tiene sabor a triunfo por la categoría del rival, por haber estado en desventaja desde casi el comienzo y con un jugador menos. Otro dato significativo es el doblete de Juan Arraya, el héroe de la jornada.
El equipo del Lobo jujeño se rehabilitó en el partido con Huracán, que llegó a Jujuy fuertemente motivado porque si obtenía un triunfo se prendía en la lucha por el ascenso directo. Sin embargo, el equipo de Parque de los Patricios se encontró con un Gimnasia que, superando el largo desánimo que como un ancla lo tenía hundido en el fondo de la tabla, hizo frente a su rival y fue capaz de superar las adversidades, recomponerse y conseguir el gol.
Las cosas empezaron mal para los jujeños, que a los 9 minutos del primer tiempo sufrieron el primer gol de Huracán, un penal ejecutado por Javier Cámpora. Otro balde de agua fría llegó a los 20 minutos, con Luciano Nieto, con lo que parecía ya echada la suerte de Gimnasia.
Con un hombre menos, ya que a los 35 minutos del primer tiempo fue expulsado el defensor Javier “Satanás” Páez, el Lobo jujeño no se dejó vencer por la adversidad y a los 30 minutos del primer tiempo un penal cobrado a Huracán le permitió a Juan Arraya festejar el primer gol de Gimnasia. Solo dos minutos después, el estadio “23 de Agosto” estalló con el segundo tanto, también logrado por el delantero jujeño, que tuvo una actuación memorable.
Con este empate, el equipo de Jujuy obtuvo un punto después de trece fechas de no haber podido sumar, lo que hace pensar que el técnico José Luis Calderón y sus jugadores podrían haber encontrado, por fin y después de tanta oscuridad, la escalera para salir del pozo.
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