La participación de Diego Maradona en el partido por la Paz que se realizó la noche de este viernes en Bogotá (Colombia) no pasó desapercibida. El argentino dejó su sello rememorando sus caricias al balón, pero también su parte oscura, la del escándalo y la pelea.
Pese a los 54 años que carga encima, Maradona, estuvo presente en Colombia en el juego que sumaba un aliento más para la reconciliación que se busca en el país cafetero desde hace muchos años. Cerca de 8.000 personas disfrutaron con los movimientos limitados del exastro argentino.
Diego ya no corre igual. A ‘El Pelusa’ se le vio pesado, cansado y con dificultad para respirar. Los deslices de la vida le pasaron factura y ahora, con más de cinco décadas encima, sigue siendo foco de críticas, escándalos y momentos noticiosos que contrastan con su buena intención de acompañar eventos como el vivido en Colombia, publicó el diario el colombiano.
En el estadio Metropolitano de Techo, al occidente de Bogotá, Diego dejó su sello. La zurda lució para marcar de penal uno de los goles de la noche. Sin embargo, la derecha le sirvió para agredir a uno de las personas que ayudó con su seguridad. Tras finalizado el encuentro, Maradona ante el asedio de las cámaras y las fuertes medidas mandó dos patadas al aire que por poco logran impactar a una de las personas que ayudaban a controlar el gentío.
Minutos después tumbó el celular de un manotazo a un asistente de un canal de televisión. “Pegó un manotazo y el celular cayó. Pensé que se me había perdido el celular por la cantidad de gente”, afirmó José David Ferrer asistente de microondas del canal Citytv. El partido terminó 2-1 a favor del equipo de Maradona, que se enfrentó con un combinando de exfutbolistas locales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario