Otra vez, como contra Olimpo, Godoy Cruz puso un equipo alternativo. Y nuevamente se llevaba tres puntos en condición de visitante. Pero, como pasó en Bahía Blanca, le empataron sobre el final con una jugada polémica. Así Tigre festejó la igualdad y dejó a los jugadoes del Tomba masticando bronca y protestando ante el árbitro.
Se podrá decir que Godoy Cruz perdió cuatro puntos por culpa de los árbitros y asistentes. Y no falta razón. Porque los goles de Bareiro para Olimpo y Straqcualursi para Tigre debieron ser invalidados por posiciones adelantadas.
Pero también es verdad que en ambos partidos, el Tomba se quedó sobre el final, abandonó cualquier posibilidad de definir el partido, se olvidó de atacar y terminó sufriendo empates que cuestan. Porque con esos cuatro puntos que dejó en los últimos minutos en Bahía Blanca y en Victoria, hoy el equipo mendocino sería uno de los punteros del Clausura 2011.
Contra los errores arbitrales poco se puede hacer. En cambio, sí se puede trabajar para que el equipo no termine sufriendo en los últimos minutos, atrapado cerca del arco de Torrico, cediéndole todo el protagonismo al rival de turno.
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