domingo, 24 de junio de 2018

Caballero encuentra refugio en sus guantes

Como una moneda, con dos caras, el Mundial de Rusia 2018 mostró al portero argentino Willy Caballero dos realidades. La más amable, resumida en su sonrisa cuando tres días antes del estreno de la Albiceleste en Moscú sentía próxima la realización de un sueño. La más desdichada, simplificada en su error en el primer gol de la selección croata el pasado jueves.

Nadie recuerda que arrancó el partido negando un gol a Ivan Perisic. Sí su fallo ante la presión de Ante Rebic que, en el minuto 53, abrió la veda. El duelo terminó con un adverso 3-0 y con la escuadra sudamericana como colista del Grupo "D".

Eso amplificó la crítica.

"No creo humano achacarle la responsabilidad a Caballero", se apresuró a decir el seleccionador Jorge Sampaoli en la rueda de prensa posterior al choque disputado en Nizhny Novgorod.

En la portería las alternativas son dos. Nahuel Guzmán, guardameta de Tigres. Franco Armani, arquero de River Plate.

Preguntado por la conveniencia de relevar al ´23´ en el decisivo encuentro del martes ante las "súper águilas" de Nigeria, Sergio Goycochea aseguró que lo arriesgado "sería poner a uno de la platea que nunca atajó".

En cualquier caso, el campeón de la Copa América en 1991 y 1993 y subcampeón del mundo en 1990 arropó a Willy Caballero.

"Es una jugada en la que tomó una mala decisión y que la terminó técnicamente de forma defectuosa, pero es un error futbolístico, nada más", dijo Goycochea al término del II Simposio del Fútbol Sudamericano organizado en Moscú por la Conmebol.

Después, destacó su valentía: "Siguió jugando con los pies". "Luego vinieron más goles, pero no tuvo responsabilidad", abundó.

José Luis Chilavert también salió en su defensa.

"Querido Willy Caballero, usted es un ganador. Los mejores también nos podemos equivocar, pero no pares a perder tu tiempo con los mediocres que te critican, que nunca vivieron el éxito como tú. Fuerza, eres un Campeón", escribió en su perfil de Twitter.

Caballero volvió a ponerse los guantes este sábado para ejercitarse junto a Guzmán y Armani en la sede de la selección argentina en Bronnitsy, una pequeña localidad situada a 60 kilómetros de Moscú.

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