sábado, 20 de abril de 2013

En 1964 Independiente conseguiría su primer título en Libertadores Entre diablos rojos y noches de copa

Con la experiencia de Boca Juniors y su gran participación un año antes, logrando instalarse como segundo, solo detrás de Santos de Brasil, Los “Diablos rojos” pusieron todo su interés en la competición sudamericana, que a la fecha se ha convertido en la más importante a nivel de clubes de nuestro continente. 1964 quedó marcado para los de Avellaneda por la conquista del primer hito en toda su grandeza y esplendor internacional. La historia de Independiente jamás volvería a ser la misma.

El simbolismo mítico creado por Independiente, el saludo a las tribunas ávidas de futbol con los brazos en alto teniendo al frente a su emblemático capitán Maldonado, se insertaron en la noche de la primera consagración continental frente a Nacional de Montevideo.

Independiente se convirtió en el primer equipo argentino en ganar la Copa Libertadores de América al vencer en Avellaneda a Nacional de Montevideo por 1 a 0 con gol de Mario Rodríguez. En el partido de ida jugado en Montevideo, no se hicieron daño, o por lo menos no vulneraron las vallas, empataron con el marcador en blanco.

La Copa Libertadores, que había consolidado años anteriores como íconos al aguerrido Peñarol de Montevideo y al mítico Santos de Pelé, serviría para catapultar a Independiente hacia el mundo y un motivo de notable orgullo para su gran Hinchada. El gran equipo que se esbozó en 1963 alcanzó su esplendor el siguiente año. A la calidad de excepción del plantel, se unió la mística ganadora del entrenador Manuel Giudice y la notable preparación física impuesta por el profesor Horacio González García. Esto marcó el origen a una formación de altísima condición técnico-táctico-física que daría enormes alegrías.

Independiente arrancó aquella copa aplastando en primera fase al Alianza Lima, de Perú, y luego al célebre Millonarios, de Colombia. Posteriormente llegó el turno del temido Santos de Brasil. Un elenco blanco que no era el mismo sin Pelé, pero que no dejaba de ser un rival de cuidado. En una noche histórica, en Maracaná, luego de ir perdiendo 2-0, Independiente reaccionó y derrotó 3-2 al dueño de casa en el último minuto del partido, con gol del centro delantero Luis Suárez. En la revancha, en Avellaneda, logró otro triunfo por 2 a 1.

En la final debió enfrentar a otro glorioso club: Nacional de Montevideo que buscaba emular las conquistas de su tradicional rival aurinegro. En encuentro que no tenía lugar a tregua, en el “Centenario” de Montevideo (Uruguay) empataron 0 a 0 y en el estadio de la Doble Visera, una semana más tarde, en otro vibrante partido, ganó Independiente 1 a 0 con gol de Mario Rodríguez, quien resultó el goleador de esa edición de la Copa con 6 conquistas.

Esos goles que sirvieron para llevar hasta lo más alto a Independiente se convertirían en mayor ingreso de capitales a las arcas del club. Por ello se dice que el popular “Mariulo” fue una de las adquisiciones más rendidoras en toda la historia de Independiente junto a ídolos históricos de la talla de: Arsenio Erico, Vicente De la Mata, Hugo Villaverde, Enzo Trossero, Daniel Bertoni y Jorge Burruchaga.

Esa noche del 12 de agosto de 1964 en medio de una enfervorizada multitud que batió record de asistencia, comenzó a forjarse la leyenda del Rey de Copas, apodo que en la actualidad distingue a los Diablos Rojos.

Recién la quinta edición de la Copa Libertadores dejó a un lado la clara hegemonía conseguida, hasta entonces, por los elencos Uruguayos y brasileros a través de sus grandes campeones. Peñarol de Montevideo y el Santos, liderizado por uno de los grandes de la historia del fútbol: Edson Arantes Do Nascimento…Un tal Pelé.

Para los clubes argentinos, la Copa recién se tornó importante gracias a la participación de Boca Juniors, que un año antes intervino en el torneo y perdió en la final Ante el Santos.

Participàron en la quinta edición de la copa los representativos de: Alianza Lima(Perú), Aurora (Bolivia), Bahía (Brasil), Barcelona (Ecuador) Cerro Porteño (Paraguay), Colo Colo (Chile), Deportivo Italia (Venezuela), Independiente (Argentina), Millonarios (Colombia), Nacional (Uruguay) y Santos (Brasil).

El equipo boliviano, Aurora, era dirigido ese entonces por Renato Penay, y el arquero del equipo del valle, un recordado por todos nosotros: José Issa, más conocido como la “araña negra”

Equipos: 11

Fecha: 3 de abril de 1964 hasta 12 de agosto de 1964

Final, partido de ida: 6 de agosto de 1964

Final, partido de vuelta: 12 de agosto de 1964

Partidos: 25

Goles: 88 (promedio de 3.22 por partido)

Ganador: Independiente (Argentina)

Segundo: Nacional (Uruguay)

Goleador: Mario Rodriguez con 6 goles

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