La ruleta del fixture hizo que la primera visita de River Plate en la B Nacional fuera a Mendoza. Ahí, el presidente del club anfitrión Independiente Rivadavia, Daniel Vila, hizo una apuesta muy fuerte. Y al único opositor a Julio Grondona para el sillón de la Asociación del Fútbol Argentino le salió bárbaro. Tanto que su decisión hoy le valió el reconocimiento de los hinchas del ascenso, que podrán regresar a los estadios visitantes. Es que luego de 4 años, la AFA dio marcha atrás con aquella prohibición "transitoria" tras una reunión de la mesa directiva de la máxima categoría de ascenso, en la que se aprobó la moción de Rosario Central. La misma le da tiempo de adecuación a los clubes que hoy no pueden recibir simpatizantes rivales y por eso es muy probable que los canallas deban esperar una fecha más para ir fuera de casa (ver página 3).
Al vender generales para "neutrales" el sábado último en Mendoza, Vila generó una prueba piloto para saber si era posible el regreso de los hinchas visitantes. El negocio le reportó además 450.000 pesos por la venta de 10.000 generales y el partido terminó en paz. Y le salió tan bien que el propio Grondona inició ayer la reunión de la mesa de la B Nacional agradeciéndole la movida al que tiene la intención de desbancarlo en octubre, quien también valoró ese gesto del titular afista.
Lo que siguió fue un largo y picante debate de los dirigentes, en donde Central, a través de su presidente Norberto Speciale, elevó la propuesta de solidaridad con los clubes que no tengan hoy la capacidad de recibir a los visitantes (como es Atlanta) para lo que queda del año, teniendo en cuenta que no hay tiempo para que reviertan condiciones edilicias y precisan una transición. Recién a partir de la segunda rueda, en 2012, deberán ajustarse a las reglas y si sus estadios no están en condiciones, tendrán que mudarse.
Luego de que los clubes de la B Nacional aprobaran por unanimidad la propuesta canalla, se elevó al comité ejecutivo de la AFA, que no puso objeciones. Y el presidente de la AFA hasta estuvo en la Casa Rosada para comunicarles las "buenas nuevas" al gobierno, que ya había expresado claramente, a través del Jefe de Gabinete (y vice de Quilmes) Aníbal Fernández, y del gobernador bonaerense Daniel Scioli, que deseaban el regreso de los hinchas visitantes.
De todas formas, serán los clubes en conjunto con los organismos de seguridad los que determinarán la presencia y la cantidad de los mismos. Por eso, el ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, junto al titular del Coprosede, Rubén Pérez, citaron a los clubes de Buenos Aires de la B Nacional para comprometerlos en la tarea. De hecho, al menos cuatro tienen hoy problemas en lo inmediato para recibir a los visitantes: Ferro, Merlo, Chacarita y Atlanta. En el interior no habría mayores dificultades.
La veda se levantó pero los hinchas de la B, C y D por ahora deberán esperar, ya que los partidos en Buenos Aires requieren más tiempo de organización, pero volverán progresivamente. Las mesas de esas categorías se reunirán hoy. Eso sí, desde lo económico a los clubes de la C y la D, como Córdoba y Argentino, no les significará un mayor gasto en policías, porque al ser divisionales amateurs los paga la AFA.
Hay otro mapa en el fútbol argentino del ascenso. La presencia de River y la movida de Vila motorizaron una nueva realidad que nunca más debería ser abortada por hechos de violencia.
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